Lunes 4 de marzo, 2024

Estamos viviendo un tiempo difícil, donde las preocupaciones son el centro de la vida cotidiana de las personas. Solemos decir que confiamos plenamente en Dios y en sus planes para nuestras vidas, pero en cuanto las cosas comienzan a complicarse, intentamos darle algún tipo de “ayudita”. Yo he estado muchas veces en esa situación, donde confiar plenamente en Dios no es sencillo para mí, y temo decir, con vergüenza, que he batallado con este sentimiento durante gran parte de mi vida. Si me preguntas si confío en Dios, te diría un ¡claro que sí!, seguido por un ¡Aleluya y Amén!, pero en el fondo, siempre está el instinto de que, si la cosa se está alargando o complicando, me arremango y comienzo a ordenar, organizar y decirle a Dios que ya estuvo, que es hora de ponerle punto final.

Te diré que he tenido que aprender, de la manera más difícil, el hecho de confiar plenamente en Dios. En ese proceso, me he aferrado a mi amada Biblia y he permitido que Dios me hablara al respecto.

Al principio, no me daba cuenta de que no confiaba en Dios como debía. Detrás de mi deseo de ser siempre proactiva, había una autosuficiencia y deseos de hacer las cosas a mi modo, en mi tiempo y no en los tiempos de Dios.

He aprendido mucho y sigo aprendiendo, por eso, quiero dejarte algunos versículos que hablan sobre dejar nuestras preocupaciones y ansiedades al Señor. Ojalá puedas aprenderlos de memoria o pegarlos en algún lugar visible, para que, cuando vengan pensamientos de preocupación, puedas contrarrestarlos usando la Palabra de Dios.

Todos los pasajes bíblicos han sido tomados de la versión Nueva Traducción Viviente (NTV).

Lunes
“No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús.”
Filipenses 4:6-7

Martes
“Dios es nuestro refugio y nuestra fuerza; siempre está dispuesto a ayudar en tiempos de dificultad. Por lo tanto, no temeremos cuando vengan terremotos y las montañas se derrumben en el mar. ¡Que rujan los océanos y hagan espuma! ¡Que tiemblen las montañas mientras suben las aguas!”
Salmo 46:1-3

Miércoles
“El Señor es un refugio para los oprimidos, un lugar seguro en tiempos difíciles.”
Salmo 9:9

Jueves
“El Señor dice: ‘Rescataré a los que me aman; protegeré a los que confían en mi nombre. Cuando me llamen, yo les responderé; estaré con ellos en medio de las dificultades. Los rescataré y los honraré. Los recompensaré con una larga vida y les daré mi salvación’.”
Salmo 91:14-16

Viernes
“Por todos lados nos presionan las dificultades, pero no nos aplastan. Estamos perplejos, pero no caemos en la desesperación. Somos perseguidos, pero nunca abandonados por Dios. Somos derribados, pero no destruidos. Mediante el sufrimiento, nuestro cuerpo sigue participando de la muerte de Jesús, para que la vida de Jesús también pueda verse en nuestro cuerpo.”
2 Corintios 4:8-10

Sábado
“Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes.”
1 Pedro 5:7

Domingo
“Así que no se preocupen por todo eso diciendo: ‘¿Qué comeremos?, ¿qué beberemos?, ¿qué ropa nos pondremos?’. Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades. Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten.”
Mateo 6:31-33

Oración
Querido Padre celestial, las preocupaciones surgen a diario, ayúdame a descansar en ti, que eres un Padre amoroso y sabes cuáles son mis necesidades. Enséñame a confiar en ti, aunque no pueda ver los resultados, tendré la certeza de que estás obrando.

En tu nombre poderoso, amén.